jueves, 9 de diciembre de 2010

Agua de lluvia para el Tutuki Splash


Atracciones que empapan, bambú chino para recrear el Lejano Oriente, campos de golf frente al Mediterráneo, una piscina de olas de estilo caribeño en un parque acuático...

El complejo de ocio de Port Aventura está pensado para disparar la adrenalina de sus clientes y devorar más de 400.000 metros cúbicos de agua al año. Pese a todo, la compañía propiedad de Criteria –hólding de participadas de La Caixa– y del fondo de capital riesgo italiano Investindustrial exhibe su respeto hacia el medio ambiente como una de sus señas de identidad, y asegura que ha recuperado hábitats naturales que se habían secado, como el espacio Sèquia Major de Vila-seca.

“La dirección de Port Aventura siempre ha estado muy sensibilizada con el medio ambiente”, explica Glòria Barberà, jefa de responsabilidad corporativa del complejo de ocio de Salou y Vila-seca (Tarragonès). El parque se diseñó en pendiente, cuyo punto más alto se encuentra en el área temática de China. De este modo, se aprovecha el agua de lluvia para llenar el lago de la zona central del área Mediterrània, uno de los iconos del parque. Este agua también se utiliza para rellenar las atracciones acuáticas del recinto, como el Tutuki Splash, y el Silver River.

Barberà destaca que Port Aventura tiene dos redes: las pluviales y las residuales. El agua potable para los clientes y para las piscinas del parque acuático se capta a través de la red común.

El agua residual, utilizada para el riego de las plantas y zonas ajardinadas, llega a través de la depuradora de aguas urbanas de Salou y Vila-seca. El agua de la depuradora que Port Aventura capta de Vila-seca se somete a un proceso de ósmosis inversa, que la convierte en agua desalada no potable, pero apta para el riego. La previsión de regeneración de agua para este año a través de la ósmosis inversa es de 460.000 metros cúbicos. Después, se distribuye a través de un sistema de riego inteligente, que evalúa a diario las necesidades de los diversos sectores y de los campos de golf. Las zonas de Port Aventura que más beben son las de Polynesia y México.

Uno de los lugares más desconocidos de Port Aventura es el invernadero, donde se reparan y preparan plantas, y donde hay plantadas reservas de especies como bambú y plataneros. De este modo, si el parque tiene necesidad de reponer o ampliar zonas verdes, puede recurrir a su propio abastecimiento.

Jardinería
El director de paisajismo y jardinería de Port Aventura, Joan Porcar, calcula que el recinto tiene más de 600 especies. Entre las más exóticas, figuran el árbol del viajero, de Madagascar; la palma real, procedente de Cuba y Bahamas, y el helecho arbóreo, de origen jurásico.

Las plantas procedentes de climas tropicales y subtropicales pasan el invierno en el invernadero, protegidas a una temperatura ambiente de 15 grados y humedad controlada.

 Fuente: Expansion.com

0 comentarios:

Publicar un comentario